Colegiata de El Salvador de Grandas de Salime

La Iglesia parroquial (antigua colegiata) de San Salvador de Grandas, surgió en relación directa con el Camino Primitivo de Santiago. El templo ya aparece mencionado en el siglo XII (1186) pero fue totalmente remodelado y ampliado en sucesivas obras en los siglos XVII, XVIII y XIX, por lo que en ella confluyen varios estilos, conservándose tan sólo la antigua portada románica, unas gárgolas próximas y la pila bautismal, de la original edificación. La iglesia tiene planta en cruz latina y una torre únicas, además de las capillas del crucero y las sacristías, que se fueron añadiendo en los siglos XVII y XVIII. La iglesia está rodeada por un pórtico (levantado en el siglo XIX) sobre arcos de medio punto que daba cobijo a los peregrinos y en el que se conservan dos sepulcros románico góticos situados al sur. La puerta interior conserva los antiguos herrajes posiblemente del s. XV.

Destaca el retablo mayor, de estilo barroco, obra del escultor gallego Juan de Castro (construido entre 1628 y 1634), al que le fue añadida una altura más hacia 1776-1778. De Juan de Castro son también la Coronación de María, la Transfiguración, San Juan Bautista, Santiago y María Magdalena. Del madrileño Froilán Barruego (s. XVIII) son las tallas de San Antonio, San Benito de Palermo y la Virgen del Carmen. Del gallego José Faxín es el retablo lateral derecho. De la escuela andaluza el Niño Jesús. Otras tallas de interés se reparten por toda la iglesia y en el pequeño museo parroquial donde se guardan también algunas imágenes procedentes de la antigua iglesia de Salime, hoy día cubierta por las aguas del Embalse de Salime.

De la fábrica medieval se conserva una magnífica portada románica, formada por un arco de medio punto con las arquivoltas no decoradas pero sí los tres capiteles en los que se apoyan que corresponden a otras tantas columnas en cada lado. En el lado izquierdo las columnas tienen el fuste listo la central pero acanalado la exterior y helicoidal la interior. En este lado, el capitel izquierdo presenta cuatro figuras, de las cuales las dos centrales aparecen abrazadas y representan a María e Isabel en el tema de la Visitación. El capitel siguiente presenta hojas de acanto y el interior dos aves bebiendo de un recipiente, tema paleocristiano. En el lado derecho los capiteles presentan dos animales alimentándose de un árbol, dos hojas de acanto con dos personajes que representan a María y San Gabriel en la escena de la Anunciación; el capitel interior de este lado remata también con hojas de acanto. El interior de las jambas de la portada representa en relieve las figuras de un caballero y una dama, cada uno en un lateral de la portada.